el blog

miércoles, 30 de noviembre de 2011

novedad musical

Sabemos por muchos de vosotros que Michel Teló lo está petando en toda España... "ai se eu te pego"!!!
Aquí os dejamos con otra canción que no para de sonar en Brasil... seremos profetas y llegará a las pistas de baile??

lunes, 28 de noviembre de 2011

las cataratas de Iguazú

Por fin llegamos a uno de los destinos más esperados de nuestro viaje, Foz de Iguazú. Desde España teníamos claro que queríamos llegar aquí pero nos hicieron venir aún más ganas la gente que fuimos encontrando durante el camino. Una chica argentina nos dijo “si vos no crees en Dios, después de ir a las cataratas pensaréis que solo él pudo crear algo así”. Nosotros seguimos poniendo en duda eso de que él fuera el creador, pero sí que es cierto que la recompensa de llegar al culo del mundo vale la pena.


Hasta el momento, éste ha sido el lugar donde más cosas atípicas nos han pasado. Después de 15 horas de bus desde Sao Paulo llegamos al hostel que teníamos reservado para la primera noche. Foz nos recibió con 35º y un sol de infarto…con tanto cambio de tiempo vamos a volvernos locos. Para aprovechar el primer día nos fuimos al Parque de las Aves para cumplir uno de mis sueños del viaje (Tamara): hacerme una foto con un tucán! Ochocientas especies distintas de aves, además de reptiles, mariposas y anfibios. Es de agradecer que los bichos no estén encerrados en jaulas diminutas, sino que son espacios gigantes donde tú puedes entrar e interactuar con ellos, arriesgándote a que te caguen o te piquen.

"El animal más bello del mundo": dice Tamara.



Y por fin se conocieron...



El nuevo Jordi Sparrow!!

A la vuelta al hostal nos volvió a ocurrir algo que nos venía pasando en otros hostels, la mezcla de culturas y lenguas es tan grande que acabas manteniendo conversaciones paralelas en inglés, portugués, español, catalán y hasta toques de francés. Vaya, que te sale humo de la cabeza.

Dado que nuestro presupuesto es reducido teníamos que decidir entre visitar las cataratas desde el lado brasileño o el argentino. Imaginaos, ir al lado argentino es  como ver un partido de fútbol desde el campo y verlas desde el brasileño es estar sentado en la grada. Nosotros queríamos jugar el partido.


Al principio tuvimos nuestras dudas porque pasar la frontera argentina lleva más tiempo del que debería… tienes que coger un bus desde Foz y bajarte en la frontera para que te sellen el pasaporte, cuando lo tienes te toca esperar a que pase otro bus que te lleve hasta el centro de Puerto Iguazú (la ciudad fronteriza argentina) y allí cambiar a pesos porque es la única moneda que aceptan para pagar la entrada a las cataratas. Y por último coger otro bus que te lleve al parque en sí. Hicimos nuestros números y entre horas y dinero nos salía más a cuenta coger una excursión organizada desde el hostel.

Ni las palabras ni las fotos que pongamos aquí sirven para explicar lo que sientes cuando estás allí. Al llegar a la Garganta del Diablo, la mayor de las cataratas, los dos dijimos lo mismo: se nos ha puesto la piel de gallina. Ver caer con tanta fuerza millones de litros de agua por segundo y sentir toda su fuerza a dos metros de ti, te hace sentir lo insignificantes que somos en este mundo. Los 100 BRL del tour han valido la pena. Después de esto entendimos por qué Foz es la segunda ciudad más visitada del país cuando ella no tiene ningún encanto.










A partir de aquí la locura se desató. Supuestamente esa noche la teníamos que pasar en casa de una couchsurfing, pero al regresar de la excursión nos llamó y nos dijo que no tenía hueco para nosotros porque el otro huésped que tenía que haber marchado seguía en su casa. Nuestro gozo en un pozo. Nos tocó pagar otra noche de hostal, aunque aprovechamos para bombardear a e-mails a otros couchsurfers. Y surtió efecto. A la mañana siguiente Enzo nos vino a recoger.

Seta que predijo nuestro futuro, la misma cara que nosotros al ver Ciudad del Este.

El tío es un abogado criminalista y la mayor parte de sus clientes son contrabandistas que traen de todo desde Paraguay a Brasil. Quizás esto lo tendríamos que haber explicado antes, pero el punto donde estamos se llama “las tres fronteras”, porque se unen Brasil, Argentina y Paraguay, tan solo separados por los ríos Paraná e Iguazú. No sé si os acordaréis pero diez años atrás se rumoreaba que Bin Laden estaba escondido en este triángulo, concretamente en Ciudad del Este, Paraguay. ¿Dónde fuimos a parar nosotros?, pues ya nos ves a los dos montados en un coche cruzando la frontera de Paraguay para ir a comprar nosequé que necesitaba Enzo. Ciudad del Este es un caos, según Jordi algo equiparable a Bangkog. Miles de personas entrando y saliendo de tiendas y cargando mercancías sospechosas, como cinco cajas de ordenadores en cada mano. I-phones, relojes de lujo, tabaco, alcohol e incluso armas que Enzo nos dijo que se podían conseguir a mitad de precio. El pavo se movía como pez en el agua.

Pero el espectáculo no acabó allí. Llegamos a su apartamento, un ático con piscina y barbacoa. Allí nos estaban esperando 5 o 6 amigos suyos, bebiendo cervezas y caipirinhas, así pasamos todo el fin de semana. Al principio nos sorprendió todo un poco pero no nos podemos quejar, el tío se portó de maravilla y nos contó un montón de anécdotas del contrabando. Solo para que os hagáis una idea, dice que hay un contrabandista que tiene un submarino para cruzar el lago Itaipú y evitar los controles de policía, parece de película pero ya sabemos que la realidad siempre supera a la ficción.


domingo, 27 de noviembre de 2011

Sao Paulo

La llegada a Sao Paulo ya fue para enmarcar. Y es que llegamos a las 5 de la mañana y el ángel que nos hospedó esta vez nos tuvo que recibir a estas horas intempestuosas.

La ciudad sin fin

Bruno, el couchsurfer de Sao Paulo, es un chico encantador que nos ofreció su casa para que estuviéramos cómodos los días que quisiéramos. Volvimos a tener suerte y es que tuvimos toda clase de lujos en el piso y en la zona en que vivimos, habitación y baño para nosotros, wi-fi, lavadora ( lo normal es llevar ropa a la lavandería), tv de plasma… en fin que Bruno se portó como un campeón!!!

Con Bruno y Brie

De Sao Paulo no hay mucho que explicar, sólo que es una mole de ciudad de 13 millones de habitantes. Lo bueno es que como todo el mundo nos había hablado tan mal de ella, a nosotros nos sorprendimos para bien. No es bonita; pero es lo más próximo a una ciudad europea. En ningún momento tuvimos sensación de inseguridad y todo es mucho más ordenado que en las otras ciudades visitadas hasta ahora. No tiene ni seguro nunca tendrá el encanto de Rio o Salvador pero sí que es una ciudad donde podríamos vivir.

En el parque Ibitapuera

Llevábamos tiempo sin ver una ciudad con tal volumen de trabajo, se respira una evolución continua. La mayoría de negocios tienen carteles con vacantes y más de una persona nos dijo que hablando español e inglés y con lo poco que “falamos” portugués no tardaríamos mucho en encontrar un empleo.

Para los que os gustan las curiosidades:

-      Sao Paulo tiene la comunidad japonesa más grande del mundo fuera de Japón. Su barrio es el de Liberdade y está lleno de restaurantes de sushi. Es rarísimo ver a un japo de los de toda la vida hablando portugués.


-       El estado de Sao Paulo acumula un 40% del PIB total del país. Ahora entendemos por qué la mayoría de brasileiros que hemos conocido por todo Brasil a la pregunta: ¿y tú de dónde eres?, ellos respondieran de Sao Paulo; son de los pocos que se pueden permitir viajar.

La catedral de Sao Paulo

-       Hay una bestialidad de helicópteros sobrevolando la ciudad. Luego nos enteramos que buena parte son de altos ejecutivos que los utilizan para volver a casa o ir a reuniones y no tenerse que chupar los atascos… recordad que son 13 millones de habitantes!!



Los cuatro días que pasamos allí nos vinieron de perlas para pensar en nuestro próximo destino. No os imagináis lo agotador que puede llegar a ser no saber donde dormirás al día siguiente pero tampoco lo divertido que es.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

paraty y unos gallegos en el camino

Parece que tenemos un don para atraer a la lluvia. Salimos de Rio hacia Paraty con un pronóstico meteorológico favorable, pintaba sol y a penas algunas nubes. Pero como todos sabéis los del tiempo se equivocan y mucho. Hemos tenido chirimiri, llovizna, chubascos y hasta tormentas, agua y agua en todas sus variantes. 



Por suerte también ha habido ratos más despejados, que no soleados, en los que hemos podido pasear por este precioso pueblo.



Como ya lo echabais en falta comenzaremos con un poco de culturilla. Los diamantes y el oro que los colonos extraían de la Chapada Diamantina y Minas Gerais lo llevaban hasta el puerto de Rio de Janeiro, donde salía en barcos hacia Portugal. Cuando los piratas descubrieron la ruta, los colonos tuvieron que cambiar de estrategia para evitar los asaltos. El nuevo puerto escogido fue el de Paraty y por eso este pueblo es tan rico en comparación con las otras localidades vecinas. Se nota que por allí pasó mucho oro en las casas y lo bien conservado que está todo. Ahora Paraty es Patrimonio de la UNESCO por la belleza de sus playas y el paisaje de montañas y bosques verdes que lo rodean.




Nosotros no pudimos disfrutar de la playa como nos hubiera gustado pero sí que visitamos algunos lugares increíbles. El primer día cogimos un bus a Trindade, un pueblo que está a tan solo 40 min (y porque las carreteras son de montaña y el bus para cada 200m a recoger gente) y la playa es la que podéis ver en las fotos. Una pasada. Estuvimos 1hora para recorrerla, caminando entre las rocas gigantes y admirando el paisaje. Una lástima que el día estuviera feucho.









Para equilibrar la balanza, todo lo que nos está perjudicando el tiempo nos los compensa la gente que estamos conociendo durante el viaje. Paraty no fue una excepción. La segunda noche de hostel llegaron una pareja de gallegos de Vigo, Tanis y Lore, y nos fuimos a tomar una cerveza juntos. Ellos habían llegado hacía una semana a Sao Paulo, que precisamente sería nuestro próximo destino, y seguían la ruta hacia Rio y el norte de Brasil. Una hora más tarde de estar con ellos ya nos sentíamos como si los conociéramos de toda la vida, son increíbles.

El día siguiente lo pasamos entero los cuatro juntos. Por la mañana el tiempo nos dio tregua así que nos fuimos en una van hasta la Cachoeira Tobogán, una bajada de agua a la que la gente va a tirarse como si fuera un tobogán, de ahí el nombre. El espectáculo lo dan un grupo de locales que se deslizan de pie, peligrosísimo pero divertido de ver. La única rajada que no se tiró fui yo (Tamara), una porque no tenía bikini y otra porque me daba miedo la caída (aunque sentado no tenía ningún peligro porque incluso podías ir lento) Lo mejor es que veáis el video de Jordi tirándose.


Muy cerquita de la cachoeira había una destilería de cachaça o pinga como lo llaman ellos. Fue chulo porque una chica nos explicó el proceso de elaboración y después nos dio a probar unas cuantas. La cachaça pura, que es la que se utiliza para las caipirinhas (aunque ellos también la beben sola o con sal y limón como un tequila) es la más fuerte, tiene una graduación de 45º y sabe como un orujo. Después hay otras que son más aromáticas, como la que nosotros compramos que lleva clavo y canela, y aunque también tiene 40º resulta más suave.




Después de comer el tiempo volvió a hacer de las suyas, así que hicimos algo muy typical spanish: jugar a las cartas. Esa noche nosotros cogimos un onibus a Sao Paulo, así que nos tuvimos que despedir de Tanis y Lore. Esperamos volver a coincidir con ellos por Sudamérica y si no nos han prometido un arroz con bogavante en Rivadeo.

Seguimos hacia Sao Paulo!!!

lunes, 21 de noviembre de 2011

Rio de Janeiro II

Los días restantes en Rio siguieron con la misma tónica de mal tiempo, nublado y a ratos con lluvia. El tercer día lo dedicamos a la zona Centro, seguimos la ruta a pie marcada por la Lonely Planet, la mítica que te hace pasar por delante de todo lo que se supone que es relevante. Bien, no hay mucho que decir la verdad, quitando una iglesia presbiteriana y el edificio de la biblioteca no hay nada que llamara especialmente la atención. Al lado de los arcos de Lapa está la Catedral…deja mucho que desear, pero ya la veréis en las fotos. Lo bueno del barrio es el ambiente. Te recomiendan ir entre semana y eso es lo que hicimos. Es chulo porque todo está lleno de tiendecillas de ropa, de cosas de casa, instrumentos musicales, zapaterías.. no es que las tiendas en sí valgan la pena pero las calles se colapsan de gente.




Ese mismo día por la noche volvimos al Centro para ver un concierto de Samba, el grupo se llamaba Sururu na Roda y fueron 4 horas de música en directo.  El espectáculo estuvo bien pero descubrimos que la Samba no es nuestro estilo preferido.

El plato fuerte lo guardamos para nuestro penúltimo día en la ciudad, el Corcovado. Allí está el Cristo Redentor, la insignia de Rio. Para llegar lo mejor es coger el tren cremallera que te lleva a través de un paisaje alucinante hasta arriba de la montaña. La verdad es que cuando llegas te quedas sin palabras, es espectacular como se ha construido una ciudad en medio de tanta naturaleza. 




Aquí el pavo no parecía tan enorme...


No es la plana de Vic, ni Santiago, ni Londres... es Rio con unas nubes que daban miedo.



Para los futboleros, aquí tenéis el Maracaná, al final no fuimos por que estaba en obras de cara al Mundial 2014.


Desde nuestro punto de vista, las panorámicas ganan por goleada a las playas de esta ciudad.

Nos vamos a Paraty!!!

viernes, 18 de noviembre de 2011

a cidade maravilhosa

Así es como llaman aquí a Rio de Janeiro. Una gran metrópoli en medio de montañas sacadas de la peli Jurassic Park y del océano, donde los contrastes de Brasil vuelven a aparecer. La riqueza de Ipanema y Leblon junto con las laderas de favelas que ocupan todos los barrios de la ciudad.


El “fenómeno” que descubrió Rio bautizó así a la ciudad porque confundió lo que en realidad es una bahía con el delta de un río. El apellido, Janeiro, es simplemente por el mes en que llegó, enero.

Otra vez, la suerte nos sonrió con el couchsurfing. En esta ocasión, Fernando y toda su familia nos acogieron durante 5 maravillosos días. Fernando tiene 26 años y es traductor de películas cinematográficas, del portugués al inglés, y un encanto de chico. Es como si nos conociéramos de toda la vida. Nada más dejar nuestras mochilas en su casa, nos llevó de cañas con su hermano, Thiago, que curiosamente está casado con uno de los autores de nuestra guía!! Los cuatro acabamos bebiendo caipirinhas en Lapa, rodeados de grupos de Samba que se estaban preparando para el carnaval. ¡Qué gran noche!

Fernando y nosotros

A pesar de que Fernando ha tenido que trabajar mucho estos días, sus padres y el resto de vecinos nos acogieron como uno más de la familia. La situación es especial, son 6 casas en una pequeña calle que está separada con una verja de la calle principal del barrio. Desde el balcón se ven favelas a un lado y otro, pero actualmente no dan sensación de peligrosidad. En la celebración de cumpleaños de Teresinha, la madre, nos explicó ella que no hace muchos años se escuchaban los tiroteos cada noche, pero desde hace 3 años han entrado en un proceso de pacificación.

Una de tantas favelas

Desde aquí queremos dar las gracias a toda la familia Fico por ser tan hospitalarios, ahora vosotros tenéis casa en España (cuando volvamos, claro)

Con la familia y vecinos y Brenda

¿Qué decir de Rio? La verdad, es una ciudad con un entorno maravilloso, probablemente el mejor que hayamos visto hasta ahora. Pero, viniendo de las playas del noreste nos esperábamos mucho más de las famosas Copacabana e Ipanema que no dejan de ser playas de ciudad. Lo bueno que tienen es que son muy dinámicas, partidos de volley, fútbol, futvolley, gente corriendo, patinando, en bici, mini-gimnasios…, por lo demás no deja de ser una gran metrópoli que va a contrarreloj para tener las infraestructuras necesarias de cara al Mundial y Olimpiadas.


Agua de coco

Otra cosa que sorprende es la cantidad de personas obesas que hay, en contraste con los cuerpos esculpidos a base de horas de ejercicio. Claro que la alimentación que tienen no ayuda mucho, empanadillas rellenas chorreantes de aceite, arroz, feijoada, en definitiva poco verde. “Donde fueras haz lo que vieras”, aquí podéis ver a Jordi machacándose.

Culto al cuerpo


Como va siendo habitual el sol se dejó ver a ratitos muy escasos, así que Rio perdió un poco su encanto. Las vistas espectaculares que se pueden llegar a ver desde el Pao de Açucar quedaron empañadas por la niebla. Aún así impresiona. Ah!!, y descubrimos que una de las películas de el agente 007 se rodó allí, es en la que un tío enorme con dientes de hierro persigue a Bond en los funiculares.

Pao de Açucar

Teleférico


Habrá una segunda parte....