Después
del último post tan denso y culturizador, qué mejor que otro capítulo que ahora
nos alimente el cuerpo y no la mente.
La
gastronomía peruana es variada y rica. Destacan por encima de todo platos como
el ceviche, la causa, el rocoto relleno,
una salsa que nos vuelve locos, “la
huancaína”, y, sobre todo, el cuy.
Este
último es una especie de cobaya, un hámster enorme que crían en las casas para
comerlo en fechas especiales. Es el conejo peruano.
cuy vivo |
Nosotros
lo probamos chactado y ésta es su presentación.
cuy muerto |
Lo
probamos una vez y no más, tiene poca carne y no es nada sabrosa. Es bonito
para la foto.
El
ceviche o cebiche, es un plato de pescado crudo aliñado con mucho limón, sal,
cebolla y el indispensable ají, que lo convierte, si no tienes cuidado, en un
plato muy picante. Aunque se puede comer en todo Perú, lo recomendable es
comerlo a partir de Lima, y sobre todo en las zonas de playa del norte, donde
estamos ahora.
La
causa es un pastel de papas (patata)
relleno de lo que sea, en esto caso fue relleno de pulpa de cangrejo pero hay
de pollo, marisco, pescado, palta (aguacate)… muy rico y acompañado de salsas
de ají. El ají para ellos es lo que para nosotros el pimiento, pero ellos tienen
infinidad de formas, tamaños y sobre todo, picantes.
Otra
cosa que nunca falta en la dieta peruana es la Inca Kola, un refresco de color radioactivo que tiene sabor a
chicle. En teoría tiene gusto a hierba luisa y/o manzanilla. A ellos les
encanta, es tanta su devoción por esta bebida que fue el único país del mundo
en el que la Coca-Cola no se pudo imponer como líder de vendas y no le quedó
otro remedio que comprar la marca peruana.
También
tienen una variedad infinita de frutas que, cuando tenemos la ocasión, no desperdiciamos
la oportunidad de probarlas. Impresionantes los zumos de maracuyá, mango, la
lúcuma y sus aguacates que no se vuelven negros a los 5 segundos de abrirlos.
maracuyá sour |
Otro
alimento básico en su dieta es el maíz, o chicha
como ellos lo llaman. Acompaña todos o casi todos sus platos y tienen distintos
tipos, para freír, cocer o incluso para hacerla bebida como la chicha morada y la chicha de jora, que tiene alcohol porque se fermenta y es la
llamada cerveza inca.
chicha morada |
Seguiremos
degustando sus platos, sobre todo Tamara, que a partir de ahora no dejará de
comer pescado y mariscos.
Pobres bichejos... No sé si sería capaz de comerme un cuy. Vivo todavía es bonito, pero así espachurrado y tostadito... me quita el hambre. Lo podían promocionar al otro lado del Atlántico para reforzar la operación biquini!!
ResponderEliminarLos zumos ya son otra historia, ummm!!
Tamara, aprovecha ahora para comer y cenar pescado, jeje!!
Un beso a los dos desde Agramunt!!
(Mañana me llevo a la Ruperta de paseo)
Belén
Hola chicos!
ResponderEliminarhace tiempo que seguimos vuestras aventuras alrededor del mundo. He intentado buscar si teneis algún mail para poder escribiros con más calma y proponeros la participación en un proyecto que se está cuajando poco a poco y que podría interesaros (como viajeros y escritores)
Si quereis mandarme un mail a destinolos30@hotmail.com y os cuento más!
Seguir disfrutando!
Raúl!! Te hemos enviado un e-mail y estamos a la espera de tu respuesta que nos has dejado bien intrigados!
ResponderEliminarMil gracias por seguirnos.
Un abrazo.
He leído los 10 capítulos de sus relatos sobre Perú en Viajeros.com, y sólo tengo elogios para ustedes: excelente la forma en que cuentan sus vivencias y excelente el contenido.
ResponderEliminarPara despedirme sólo quiero hacer gala de una manía que tengo por corregir información. La gaseosa que tenía sabor a Hierba Luisa era una que existió hace más de 30 años y que se llamaba Pasteurina. Mucha gente local la confunde con Inca Kola por el color similar.
El sabor de Inca Kola es de un "Cocktail de Frutas", lo que quiera que signifique eso. Saludos. ;)
Hola Jackson!!
ResponderEliminarMil gracias por leernos, nos encanta tener gente nueva que nos visita!!!
Ya nos parecía raro que la Inka Kola tuviera sabor a hierba luísa... nosotros no se lo sacábamos por ningún lado pero es lo que nos dijeron unos amigos en Perú! Lo cierto es que sabe a chicle, jejeje.
Un abrazo!